Galette Salada de Cebolla Caramelizada y Champiñones

sept 3
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Galette Salada de Cebolla Caramelizada y Champiñones

Disfruta una tarta rústica con masa hojaldrada que envuelve una mezcla sabrosa de cebolla caramelizada, champiñones, tomillo fresco y queso Gruyère. Esta galette vegetariana es rica en sabor, fácil de compartir y perfecta para una cena acogedora, almuerzo o como aperitivo elegante. Cada bocado aporta notas dulces, mantecosas y terrosas.

Esta galette salada de cebolla caramelizada y champiñones es una deliciosa tarta rústica que combina una masa dorada y hojaldrada con un relleno sabroso y profundo en sabor. La masa mantecosa encierra una mezcla de cebollas caramelizadas dulces y champiñones terrosos, realzados con tomillo fresco y un toque de vinagre balsámico para mayor profundidad. Las cebollas se cocinan lentamente hasta dorarse y volverse dulces, y luego se combinan con champiñones salteados para obtener un sabor casi carnoso. Un poco de queso Gruyère rallado sobre el relleno antes de doblar los bordes de la masa agrega un sabor cremoso y a nuez, y ayuda a unir el relleno. La corteza de forma libre se hornea hasta quedar crujiente y dorada, contrastando maravillosamente con el relleno suave y aromático. Sirve esta deliciosa galette como plato principal de una cena vegetariana, un almuerzo lujoso o córtala en porciones para un aperitivo elegante en tu próxima reunión. Seguro que impresionará tanto a vegetarianos como a carnívoros, y puede disfrutarse caliente o a temperatura ambiente.

Ingredientes

  • Harina de trigo — 1 1/4 tazas (160g)
  • Mantequilla sin sal fría — 1/2 taza (113g), en cubos
  • Sal — 1/2 cucharadita
  • Agua helada — 3-4 cucharadas
  • Aceite de oliva — 2 cucharadas
  • Cebollas amarillas — 2 grandes, en rodajas finas
  • Champiñones cremini o blancos — 225g (8 oz), en rodajas
  • Hojas de tomillo fresco — 1 cucharadita
  • Vinagre balsámico — 2 cucharaditas
  • Sal y pimienta — al gusto
  • Queso Gruyère — 1/2 taza (50g), rallado
  • Huevo — 1, batido (para barnizar)

Direcciones

1. En un bol, mezcla la harina y la sal. Incorpora la mantequilla fría hasta lograr una textura arenosa. Añade el agua helada poco a poco hasta que la masa se una. Forma un disco, envuelve en plástico y refrigera al menos 30 minutos.
2. Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Añade las cebollas con una pizca de sal. Cocina, removiendo a menudo, durante 20-25 minutos hasta que estén suaves y doradas.
3. Agrega los champiñones y el tomillo. Saltea 8-10 minutos hasta que los champiñones estén tiernos y se haya evaporado el líquido. Incorpora el vinagre balsámico y sazona con sal y pimienta. Deja enfriar un poco.
4. Precalienta el horno a 200°C (400°F). Enharina una superficie y estira la masa en un círculo de 30 cm. Pásala a una bandeja con papel de horno.
5. Distribuye la mezcla de cebolla y champiñones sobre la masa, dejando un borde de 5 cm. Espolvorea el queso Gruyère.
6. Dobla los bordes de la masa sobre el relleno, formando pliegues. Barniza la corteza con huevo batido.
7. Hornea 35-40 minutos hasta que la masa esté dorada. Deja enfriar un poco antes de cortar y servir.
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